La escritura es un código de lenguaje establecido por convención social, traducido en signos particulares para cada cultura. Mantienen un ordenamiento para poder transmitir un mensaje pero al mismo tiempo requieren de una destreza para el trazo de cada letra, la unión de las mismas, la separación entre palabras, la organización espacial de izquierda a derecha en casi todos los idiomas como en otros será de derecha a izquierda o en forma vertical.

Al ser producto de una convención, su aprendizaje no es innato ni adquirido mediante el proceso de imitación como otros gestos ligados a los hábitos cotidianos como la higiene o la alimentación; sino que requiere de una enseñanza formal.

Hay niños que aprenden a leer sin dificultad pero que presentan fallas en la producción escrita y viceversa.
En general cuando un niño presenta dificultades para leer, los padres suelen expresar
“no termina de aprender a leer bien”, “le cuesta” considerando esta dificultad como parte del proceso de aprendizaje; sin embargo frente a un niño que no escribe de manera legible las apreciaciones suelen ser:
“es desprolijo”, “es vago”, “la maestra no le corrige adecuadamente”,”no le exige lo suficiente”, etc. De manera que las connotaciones no están orientadas a una falla en el aprendizaje o un trastorno de su capacidad psicomotriz sino a las características personales tanto del niño como del/la docente.

Dentro de los denominados Trastornos de Aprendizaje encontramos:
Dislexia: fallas para el aprendizaje de la lectura
Discalculia: fallas para el aprendizaje de cálculos

Trastornos de la escritura: que se subdivide en:

a) Disortografia: fallas en el aprendizaje y aplicación de las reglas ortográficas y puntuación
b) Disgrafía: fallas en la realización de la escritura en forma legible.

Estos trastornos pueden darse en forma aislada o combinada.
Los aprendizajes de lectura, escritura y cálculo son los basamentos y herramientas prácticas para toda la escolaridad por eso deben consolidarse en los primeros grados.
Al configurar herramientas básicas para aprendizajes presentes y futuros, el primer ciclo escolar debería ser también el momento de una detección temprana para su derivación y atención correspondientes.

En los casos de disgrafía o escritura ilegible y desordenada, los niños no necesariamente presentan dificultades cognitivas. La capacidad de aprendizaje puede ser adecuada para la edad, pero la ejecución del trazo se presenta defectuosa. El niño posee capacidad para responder preguntas, tiene imaginación para crear una historia coherente y rica en vocabulario sin embargo, empobrece su producción ya que al ser un obstáculo el dibujo de la letra intentan escribir lo menos posible. Sus producciones comienzan a ser acotadas, sintetizan y tienden a reemplazar una estructura compleja por frases simples.
Los niños que presentan esta dificultad se frustran porque no pueden plasmar lo que son capaces de producir con el pensamiento.
Generalmente estas fallas van acompañadas de otras dificultades en destrezas que requieren el uso de la motricidad fina; el uso de las manos en forma complementaria o de los dedos de manera discriminada tanto dentro del ámbito escolar por ej: recortar con tijera uso de regla, sacapuntas etc. , como en la vida diaria por ej. vestirse, atarse y desatarse los cordones de las zapatillas o para el uso de utensilios como tenedor y cuchillo.

 

En línea general, podemos mencionar:

  • Inhibición y control neuromuscular
  • Control postural y postura adecuada con máxima estabilidad
  • Independencia de la mano respecto del movimiento global del brazo
  • Control del movimiento y coordinación funcional de ambas manos
  • Funciones diferenciadas de los dedos de la mano
  • Prensión adecuada; si es atípica debe ser eficaz para la producción gráfica.
  • Coordinación de la prensión y la presión
  • Presión adecuada: de la mano sobre el lápiz y del lápiz sobre la hoja
  • Adecuado uso del lápiz, fuerza, dirección y velocidad
  • Coordinación viso motriz u óculo -manual
  • Percepción visual para discriminar: figura-fondo / forma / tamaño
  • Lograr un adecuado seguimiento visual secuenciado lateral (de izquierda a derecha)
  • Lograr un adecuado seguimiento visual en la combinación: vertical (pizarrón)/horizontal (cuaderno) durante la copia
  • Organización espacio temporal:
  • Organización en el espacio del renglón sin involucrar los márgenes
  • Organización lateral de izquierda a derecha en los sucesivos renglones hacia abajo
  • Ritmo adecuado en la ejecución
  • Definición de la lateralidad

  • Trazo inadecuado: discontinuo, tembloroso, irregular, presencia de tachaduras, demasiada presión que llega a “tallar” la hoja
  • Fallas en la organización espacial: no respeta el renglón, no separa adecuadamente las palabras, excesivo espacio entre palabras o palabras apiñadas, escritura en espejo
  • Fallas en el diseño: presentan imprecisión en el trazo y no logran la forma apropiada de la letra
  • Desorganización del diseño: no mantiene un tamaño constante, fallas en discriminar las letras que suben, bajan o se mantienen en el renglón, uniones defectuosas en letra cursiva.
  • Fallas en la planificación motriz
  • Lentitud en la producción escrita
  • Fallas en la organización y control tónico-postural
  • Postura inadecuada
  • Fallas en la dominancia lateral: ambidextrismo, zurdo contrariado o lateralidad cruzada


Es necesario tener en cuenta el factor edad dado que este trastorno empieza a manifestarse durante el período de aprendizaje formal de la escritura. Primero el niño debe haber alcanzado el reconocimiento e internalización de las letras, su sonido y la capacidad de unión de las mismas para la conformación de la palabra; para luego pasarlo a la forma gráfica.

Para el establecimiento del diagnóstico se debe esperar hasta los 6 y 1/2 o 7 años.
Además se debe descartar: ausencia de daño neurológico, sensorial, cognitivo o motriz severo.
Corroborar que la capacidad intelectual del niño se encuentre dentro de los límites normales y que provenga de un contexto con estimulación cultural y pedagógica adecuada

Realizar una consulta a tiempo previene que el trastorno se instale. Lo que comienza como una simple dificultad se revierte antes de convertirse en un obstáculo para el aprendizaje. Si bien el diagnóstico no se puede concluir hasta alrededor de los 7 años, en muchos casos es conveniente realizar una consulta e intervención con anterioridad si se detectan en el hogar o en la escuela más de dos signos asociados.
En el transcurso de preescolar es perfectamente detectable. Un apoyo desde la terapia psicomotriz garantizaría una mejor calidad de producción al momento del ingreso al aprendizaje formal evitando un monto de frustración que incidiría en el aspecto emocional y una disposición positiva hacia el contexto escolar.


se realiza con múltiples actividades y juegos para alcanzar mejor dominio de las habilidades que requieren motricidad fina, sin necesariamente estar ejercitando la escritura ya que eso provocaría gran resistencia en el niño.

  • Mejor dominio de las habilidades psicomotoras
  • El automatismo motor
  • La economía de esfuerzo para mejorar la producción de pensamiento y la capacidad de aprendizaje
  • Que el niño no deje de comunicar y producir
  • Pasaje de la resistencia a una actitud de perseverancia

. Un niño disgráfico es un niño que se fatiga rápidamente cuando realiza la tarea porque la producción escrita le resulta de una exigencia demasiado alta y no ha alcanzado economía de esfuerzo.
Cuando el niño se cansa empeora aún más, desorganiza su escritura en la forma y tamaño; aumenta la presión sobre el lápiz y sobre la hoja. La letra se vuelve ilegible. Ante este resultado aparece la frustración, el enfado o las ganas de renunciar. El agotamiento es muscular pero también psíquico.

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  • El niño disgráfico necesita más tiempo para realizar las tareas.
  • Es importante corregir sistemáticamente para que no se instalen los errores no solo en la ortografía, también en el diseño de las letras.
  • Acompañar las correcciones haciéndoles notar aquello que han hecho bien o han avanzado aunque sea en pequeña escala. Valorar siempre el progreso.
  • Es importante que no solo el docente pueda descifrar la escritura sino también el niño su propia producción.
  • La copia de las consigan de trabajo pueden fatigar mucho al niño restando una buena disponibilidad para la resolución de las mismas; sería beneficioso que el/la docente le copie el enunciado.
  • Armar un código que indique el comienzo y finalización del renglón
  • Escribir dejando renglón por medio si aún no ha regulado el tamaño de la letra
  • Al momento de evaluar sería positivo que una parte sea en forma oral ya que el rendimiento mejora sin la exigencia de la escritura.
  • Necesitan de organizadores externos para su mesa de trabajo con los útiles hasta que logren hacerlo en forma autónoma
  • Es importante una ubicación adecuada si son zurdos y comparten el banco con un compañero
  • Resulta más adecuado sentar al niño con compañeros que son organizados con sus útiles de trabajo
  • Debe mantener un buen apoyo de los pies sobre el suelo (sin que queden colgando si es de baja talla) y que pueda apoyar ambos brazos sobre la mesa de trabajo cuando escribe.
  • Colocar adaptadores al lápiz para mejorar la prensión
  • Observar que las mangas del delantal o buzo no tapen sus manos.
  • No comparar con compañeros prolijos ni hacer chistes sobre sus dificultades frente a la clase
  • Es mejor que lleve tarea a su casa si no ha finalizado en clase a quedarse sin recreo; el niño necesita ese tiempo de expansión y descarga para volver a la exigencia que requiere el proceso de aprendizaje
  • Comprometer a la familia para que colabore sin castigar.
  • Observar la realización de la tarea en clase para prevenir un estado de fatiga excesiva que obture al niño

. En la actualidad el uso de computadoras facilita al estudiante la posibilidad de presentar trabajos prolijos, permite al niño regular el esfuerzo y mejorar la calidad de aprendizaje al tiempo que garantiza que su trabajo es legible y el docente mejore su concepto; sin embargo antes de ceder a esta tentación tecnológica vale la pena que el niño aprenda a escribir con suficiente destreza porque se encontrará en muchas ocasiones con necesidad de hacerlo sin contar con la computadora y fundamentalmente porque en la primera infancia es la etapa fundamental para asentar estos aprendizajes que luego se dificultan sobremanera.

Lic. Paula Landen